Hace sólo unos meses Celya sacaba a la luz la Antología de la Poesía Ibérica "Vento / Viento" (Sombra de vozes / Sombra de voces), dirigida por Joan Gonper y Pedro Salvado, y prologada por Gabriel Magalhaes. La obra fue presentada unos días más tarde en la Universidad de Beira Interior (Portugal), y en ella tuve el honor de participar con mi poema "Cierzo", que podéis leer dentro de esta misma página en archivo de fecha 29 de Septiembre.
"Vento/Viento" recopila obras de sesenta y nueve poetas españoles y portugueses de reconocido prestigio: Adolfo Casais Montero, Alfonso Lopes Vieira, Alberto de Serpa, Ana Braz, Ana Luisa Amaral, Ana Merino, Ántonio Afonso, Antonio Gamoneda, Antonio Colinas, Antonio Colinas, Antonio Pérez Morte, Antonio M. Pires Cabral, Antonio Sáez Delgado, António Salvado, Aurelino Costa, Delfim Ferreira Leitao, Enrique Villagrasa, Eugénio de Andrade, Fermín Heredero, Fernando Echevarria, Fernando Namora, Florbela Espanca, Gonzalo Escarpa, Goncalo Salvado, Ignacio Elguero, Isabel Bono, Jaime Siles, Jesús Losada, Joao Rasteiro, Joao Ríos, Joao Rui de Sousa, Jorge Fragoso, Jorge de Sena, Jorge Villalmanzo, José do Carmo Francisco, José Gomes Ferreira, José Luis García Herrera, José Luis Peixoto, José Luis Pérez Pastor, José Manuel Prado Antúnez, José Régio, José Ribeiro Ferreira, Juan Antonio González Iglesias, Juan Manuel Rodríguez Tobal, Julia Otxoa, Justo Alejo, León Felipe, Luis Alberto de Cuenca, Luis Carbalho, Luis Felipe Macarico, María Ángeles Maeso, Maria Joao Fernández, Maria Lucília Mercés de Melo, Maria do Rosairo Pedreira, Marta Agudo, Miguel Torga, Natália Teles Nunes, Natércia Freire, Nicolau Saiao, Pedro Sena-Lino, Rafael Dionisio, Reinaldo Ferreira, Ruy Ventura, Santos Jiménez, Sebastiao de Gama, Teixeira de Pascoaes, Valter Hugo Mae y Victoriano Crémer. No entraré a valorar esta obra colectiva, intensa, de la que formo parte!
Me voy, eso sí, dejandoos, en lugar de mi opinión personal, un hondo poema de León Felipe.
¡Que lo disfrutéis!
ME VOY PORQUE LA TIERRA YA NO ES MÍA
porque mis pies están cansados,
mis ojos ciegos,
mi boca seca,
y mi cuerpo dócil y ligero,
para entrar en el aire.
Me voy porque ya no hay caminos para mi en el
suelo.
Salí del agua, he vivido en la sangre
y ahora que me espera el VIENTO
para llevarme al sol...
Salí del mar... y acabé en el fuego.