¡P´alante! (Cómo dice el tío Ángel)
Día intenso y cálido tras una semana vacía y fría, con el temible aviso de la puta ansiedad: No, no voy a hacerle caso por mucho que se empeñe. No va a conseguir vencerme una vez más. No le servirá de nada. Continuaré así, sin bajar la guardia, luchando contra esta repugnante terrorista que dispara siempre por sorpresa y por la espalda, mientras uno sólo pretende cumplir su cometido... No le servirá mostrarme tanto sufrimiento inútil, porque siempre tendré cerca el bálsamo natural de la sonrisa de un niño; tampoco lo logrará recreándose en la intransigencia y la violencia, porque mi corazón late con el latido esperanzado y solidario de quienes dedican su vida a los demás. No podrá aunque haya perdido, para siempre, en el camino, a dos irreemplazables amigos más. No, no podrá porque nunca le será posible arrebatarme mi amor por ellos ni sus recuerdos. No lo hará. Venceré sus maquiavélicas estrategias porque yo también tengo las mías: Sé cómo abrir las puertas que se cierran y lo que debo decir cada vez que me llaman. Porque sé sonreir y andar erguido, acabaré con con esta bicha asquerosa que pretende quedarse a vivir en mi estómago y en mi cabeza. No podrá, tengo recursos contra ella: Una familia y amigos que me quieren y a los que quiero; lectores que me reclaman libros nuevos y agotados... Porque todavía me quedan muchos cuadros por contemplar y música y lectura para disfrutar acompañado o en silencio. Porque tengo ilusión, esperanza y proyectos para sumar a los activos contables cotidianos y cuadrar al final las columnas vertebrales de mi vida. Ayer las reforcé en casa de Lola Clemente y Paco Romero (las dos familias al completo) con una paella llena de "bichos", anécdotas y afecto, y después en el parque de Jaca, con una argamasa consistente, elaborada con besos, estrujones, abrazos, canciones y palabras amigas de Ángel Petisme y Miki, de Carlos Castán, de Héctor Lera y Suso Sáiz. Mi hijo Juan les engañó con su carita de no haber roto nunca un plato y les entregó esas "pasticas" de Sabiñánigo que tanto le gustan: Hoy cambiaremos de música. Escucharemos al tío Ángel. ¡Otro día ya volveremos a Amaral!
11 comentarios
Antonio -
¡Besos y abrazos a los cuatro!
laMima -
Respirar ese cierto aire colonial resultó magnífico...como el de la "tacita de plata".
Tienes razón: la bicha resiste mal los cambios de hábitos..afortunadamente.
Te mando mil brisas de mar, soleadas.
Antonio -
A mí también me supo a poco, pero teníamos abandonado al heavy y a las "frioleras".
¡Besos!
¡
Antonio -
Ángel Petisme -
laMima -
Creo que empiezo a saber de verdad lo que es tener una "bicha" de esas dentro y empiezo a entender mejor esa batalla. Me alegro de que tengas toda la artillería de tu lado...y sobre todo de leer ese genio.
Un abrazo gaditano (este lugar está siendo un bálsamo).
Antonio -
elbarzal -
Besos
Entrenomadas -
Adelante,
Besos,
M
Besos,
M
Luisa -
Un besote vacacional (que también quiere ayudar)
Fernando -