Gracias Javier, por reproducir aquí el texto de mi buen amigo, el poeta "invisible" David González.
No se puede eludir, negar ni alterar la importancia de su obra poética, por la omisión (voluntaria o no) de una reseña en un medio de comunicación: Desgraciadamente es algo que sucede con demasiada frecuencia, y en todos los ámbitos de la información.
Entiendo absolutamente su cabreo, sin embargo no creo que esté (ni deba estar) en manos de la organización de esta "1ª Semana de Poesía Ultima" (que le seleccionó entre un reducido número de autores), el control de los contenidos que aparecen en prensa, radio o televisión.
La ausencia de David González en la lectura del próximo Jueves 19 de abril (opción que respeto), sólo pejudica al propio autor, a sus lectores y a quienes con la mejor voluntad, contaron con él, como una de las voces imprescindibles de nuestra poesía reciente. Un abrazo!
Javier López Clemente -
Los versos más nuevos se dan cita en Zaragoza Por: David González
Elena Medel, Martín López Vega, Antonio Orihuela, Pablo García Casado, Luis Muñoz, Francisco Javier Rodríguez Marcos, José Luis Piquero, o los aragoneses David Mayor, Sergio Algora, Octavio Gómez, Gabriel Sopeña, Ángel Gracia o Lorenzo Oliván, entre otros, participan en la I Semana de Poesía Ültima, que se inaugura hoy en Zaragoza. Así empieza un artículo sobre esta historia en la versión digital de El Heraldo de Aragón. Más abajo se menciona a José Luis Antonio de Villena...Así que en el enunciado, entre otros, solo quedamos 6 poetas a los que no se nos menciona por nuestro nombre (somos 20 los poetas participantes en esta Semana Última). Entonces lo que yo me pregunto es lo siguiente: si al "periodista" que escribió esto le cuesta tanto esfuerzo mencionar el nombre de los 20, ¿por qué cojones voy a tener yo que meterme entre pecho y espalda un viaje de casi 8 horas si total ni se acuerdan de mi nombre? Es decir: llevo toda mi vida, toda mi puta vida, luchando por mi nombre: David González, y a estas alturas de mi vida y de mi vida poética considero un menosprecio y una falta de respeto hacia mi poesía, hacia mi trabajo y hacia el nombre y apellidos que me han puesto mis padres y que llevo con orgullo, que el hecho de que a un tipo cuyo trabajo es escribir este artículo, por la razón que sea, le cueste tanto esfuerzo mencionar, como sería lo correcto, el nombre y apellido de cada uno de los 20 poetas participantes y se nos meta en el saco entre otros, como si uno no fuese más que una especie de relleno a algo parecido...Por lo que teniendo en cuenta que yo leo el último día y a la hora en que lo tendría que hacer, sí están dos poetas (a uno de ellos lo considero un hermano) a los que se menciona por su nombre y apellido, y dado que el mío es invisible, no veo ya ningún motivo para acercarme por Zaragoza la próxima semana. Quiero dejar claro que esto no tiene nada que ver con la Organización de esta historia, que se ha portado de puta madre y me han atendido más que bien (en especial Manuel Vilas y Pilar SanMartín), pero sí tiene que ver con la desidia de la prensa o de cierta prensa o de ciertos periodistas, y como ya dije: no estoy dispuesto a que se me siga negando el nombre y el apellido...Podéis pensar que peco de orgullo o de vanidad o podéis pensar lo que queráis (vivimos en un país libre, decía Roberto Iniesta), pero en realidad solo lucho por lo que considero justo: recibir el mismo trato que reciben los demás. Solo eso. Y si para ello tengo renunciar a acudir a Zaragoza, pues renuncio. Pero, ya os digo: voy a seguir luchando por mi nombre y por mis apellidos en todos los frentes que haga falta y me suda la polla el precio que tenga que pagar para ello, pero algunos van a empezar a respetar mi nombre y mis apellidos por cojones o por política y caso de no ser así, yo actuaré en consecuencia: en este caso, no acudiendo a la lectura del próximo jueves. Dicho esto, solo me queda desearle mucha suerte a todos los poetas presentes, y en especial a mis amigos Antonio Orihuela y Eva Vaz (que aunque tampoco se mencione su nombre en dicho artículo, seguro que dará una lectura que se va a tardar tiempo en olvidar).
Javier López Clemente -
Si el resto de las jornadas son tan brillantes como la inaguración estamos de enhorabuena.
Incluida la surrealista intervanción del funconario avisanto "manu militari" que era la hora de cerrar. Toda una metáfora: Los poetas leyendo su obra en los sotános de la biblioteca y un peón del sistema cultural amenza de cierre.
3 comentarios
Antonio -
No se puede eludir, negar ni alterar la importancia de su obra poética, por la omisión (voluntaria o no) de una reseña en un medio de comunicación: Desgraciadamente es algo que sucede con demasiada frecuencia, y en todos los ámbitos de la información.
Entiendo absolutamente su cabreo, sin embargo no creo que esté (ni deba estar) en manos de la organización de esta "1ª Semana de Poesía Ultima" (que le seleccionó entre un reducido número de autores), el control de los contenidos que aparecen en prensa, radio o televisión.
La ausencia de David González en la lectura del próximo Jueves 19 de abril (opción que respeto), sólo pejudica al propio autor, a sus lectores y a quienes con la mejor voluntad, contaron con él, como una de las voces imprescindibles de nuestra poesía reciente.
Un abrazo!
Javier López Clemente -
Por: David González
Elena Medel, Martín López Vega, Antonio Orihuela, Pablo García Casado, Luis Muñoz, Francisco Javier Rodríguez Marcos, José Luis Piquero, o los aragoneses David Mayor, Sergio Algora, Octavio Gómez, Gabriel Sopeña, Ángel Gracia o Lorenzo Oliván, entre otros, participan en la I Semana de Poesía Ültima, que se inaugura hoy en Zaragoza.
Así empieza un artículo sobre esta historia en la versión digital de El Heraldo de Aragón. Más abajo se menciona a José Luis Antonio de Villena...Así que en el enunciado, entre otros, solo quedamos 6 poetas a los que no se nos menciona por nuestro nombre (somos 20 los poetas participantes en esta Semana Última). Entonces lo que yo me pregunto es lo siguiente: si al "periodista" que escribió esto le cuesta tanto esfuerzo mencionar el nombre de los 20, ¿por qué cojones voy a tener yo que meterme entre pecho y espalda un viaje de casi 8 horas si total ni se acuerdan de mi nombre? Es decir: llevo toda mi vida, toda mi puta vida, luchando por mi nombre: David González, y a estas alturas de mi vida y de mi vida poética considero un menosprecio y una falta de respeto hacia mi poesía, hacia mi trabajo y hacia el nombre y apellidos que me han puesto mis padres y que llevo con orgullo, que el hecho de que a un tipo cuyo trabajo es escribir este artículo, por la razón que sea, le cueste tanto esfuerzo mencionar, como sería lo correcto, el nombre y apellido de cada uno de los 20 poetas participantes y se nos meta en el saco entre otros, como si uno no fuese más que una especie de relleno a algo parecido...Por lo que teniendo en cuenta que yo leo el último día y a la hora en que lo tendría que hacer, sí están dos poetas (a uno de ellos lo considero un hermano) a los que se menciona por su nombre y apellido, y dado que el mío es invisible, no veo ya ningún motivo para acercarme por Zaragoza la próxima semana. Quiero dejar claro que esto no tiene nada que ver con la Organización de esta historia, que se ha portado de puta madre y me han atendido más que bien (en especial Manuel Vilas y Pilar SanMartín), pero sí tiene que ver con la desidia de la prensa o de cierta prensa o de ciertos periodistas, y como ya dije: no estoy dispuesto a que se me siga negando el nombre y el apellido...Podéis pensar que peco de orgullo o de vanidad o podéis pensar lo que queráis (vivimos en un país libre, decía Roberto Iniesta), pero en realidad solo lucho por lo que considero justo: recibir el mismo trato que reciben los demás. Solo eso. Y si para ello tengo renunciar a acudir a Zaragoza, pues renuncio. Pero, ya os digo: voy a seguir luchando por mi nombre y por mis apellidos en todos los frentes que haga falta y me suda la polla el precio que tenga que pagar para ello, pero algunos van a empezar a respetar mi nombre y mis apellidos por cojones o por política y caso de no ser así, yo actuaré en consecuencia: en este caso, no acudiendo a la lectura del próximo jueves.
Dicho esto, solo me queda desearle mucha suerte a todos los poetas presentes, y en especial a mis amigos Antonio Orihuela y Eva Vaz (que aunque tampoco se mencione su nombre en dicho artículo, seguro que dará una lectura que se va a tardar tiempo en olvidar).
Javier López Clemente -
Incluida la surrealista intervanción del funconario avisanto "manu militari" que era la hora de cerrar.
Toda una metáfora: Los poetas leyendo su obra en los sotános de la biblioteca y un peón del sistema cultural amenza de cierre.
Salu2 corneos.