MANUEL VILAS

No está mal acabar una jornada de excesos con Manuel Vilas. No está mal sacar billete en La Estación Azul para viajar al cielo con la compañía de Javier Lostalé e Ignacio Elguero. No, no está mal, y menos, si la música para el viaje la pone Lou Reed.

Manolo, con voz pausada, tranquila, va descubriéndonos su personalísima visión de la poesía, mientras desgrana inéditos poemas en prosa y versos blancos, que saboreamos despacio, como la delicada crema de un Magnum.

No, no está mal, aunque hoy hayas sufrido algún que otro efecto secundario: ¡Tararear todo el día la misma canción¡ ¡O esa extraña fijación con las manos, de las cajeras de los supermercados!

3 comentarios

[Antonio - 07 de septiembre de 2005 - 15:41]

Todo tiene su explicación.
Ésta, la descubrirás en el proximo poemario de Manuel,
que verá la luz en Octubre,
dentro de la Colección Visor de Poesía, que aprovecho para recomendarte ya.

[Cide - 07 de septiembre de 2005 - 12:42]

Qué fijación más extraña. Me recuerda a la fijación que tenía el protagonista de "El marido de la peluquera" con los pechos de las mujeres que le cortaban el pelo.

[Raquel - 06 de septiembre de 2005 - 13:18]

No, no está mal.
Yo leo y releo a Manuel, al final del día. Me encanta su prosa, su poesía.
Tengo ganas de que llegue el otoño para leer su último libro.

Besos para él y para ti, Antonio, que haces este maravilloso blog que no deja de crecer.