Una vida tranquila (Un poema de Ángel Guinda)
Me he castigado tanto el cuerpo, el alma,
que sólo tengo ganas de volver,
desatado de todo y de mí mismo,
a ese lugar donde las horas cunden,
fértiles, y pensar aprovecha como
un zumo fresco de frutas bajo el sol. Pasear
-observando el vuelo raso de la neblina
y las candelas del atardecer- empapado
de olor a savia, camino de la casa. Y allí,
junto al hogar, poner un poco de orden
al estrépito de los años, a los muebles
de la memoria: oír el llover lento
de la conciencia calar en el eco de mis pasos,
dispuesto a vigilar, aunque sea de reojo,
el reloj del adiós. Me he castigado
tanto el cuerpo, el alma,
que tengo ganas de regresar al campo
a ver amanecer; escuchar
el agua del deshielo rodar por la montaña;
colmarme de paz de los senderos
intransitados, del canto de pájaros
e insectos, de la brisa que estremece
las manos de los árboles; tropezar
con las piedras al contemplar las nubes.
Sentir que, sin saberlo,
estuve tanto tiempo vivo y aún lo estoy.
(Ángel Guinda / Del poemario "Biografía de la muerte" , Huerga y Fierro 2001)
ILUSTRACIÓN: JOSÉ LUIS LASALA.
que sólo tengo ganas de volver,
desatado de todo y de mí mismo,
a ese lugar donde las horas cunden,
fértiles, y pensar aprovecha como
un zumo fresco de frutas bajo el sol. Pasear
-observando el vuelo raso de la neblina
y las candelas del atardecer- empapado
de olor a savia, camino de la casa. Y allí,
junto al hogar, poner un poco de orden
al estrépito de los años, a los muebles
de la memoria: oír el llover lento
de la conciencia calar en el eco de mis pasos,
dispuesto a vigilar, aunque sea de reojo,
el reloj del adiós. Me he castigado
tanto el cuerpo, el alma,
que tengo ganas de regresar al campo
a ver amanecer; escuchar
el agua del deshielo rodar por la montaña;
colmarme de paz de los senderos
intransitados, del canto de pájaros
e insectos, de la brisa que estremece
las manos de los árboles; tropezar
con las piedras al contemplar las nubes.
Sentir que, sin saberlo,
estuve tanto tiempo vivo y aún lo estoy.
(Ángel Guinda / Del poemario "Biografía de la muerte" , Huerga y Fierro 2001)
ILUSTRACIÓN: JOSÉ LUIS LASALA.
2 comentarios
Sandra -
y a sus amigos por compartir con los lectores sus obras...
Hacéis la rutina más llevadera!
acróbatas -
al estrépito de los años, a los muebles
de la memoria: oír el llover lento
de la conciencia calar en el eco de mis pasos,
dispuesto a vigilar"
... Justo ese trocito me puso el bello de punta...
Gracias por compartir.