Más allá de la postmodernidad: Introducción crítica a la Nueva poesía Hispanoamericana (Un estudio de Leo Zelada)
La presente introducción crítica pretende esbozar algunos lineamientos generales por donde se está debatiendo los derroteros de la poesía actual escrita en nuestro idioma. Esta mirada poética está basada en la experiencia que tiene el compilador como creador poético y analista participante de esta nueva generación de liróforos que está creando las nuevas poéticas en lengua castellana.
Toda labor crítica literaria es sólo un acto de aproximamiento hacia una "singularidad" física como es el arte poética. Las diferentes entradas teóricas a la comprensión de la poesía, se pueden reducir a dos formas de analizar el poema, al cual ellos llaman asépticamente texto y la segunda -más flexible- es una mirada contextual que pretende ser un ingreso a una interpretación del contexto en el cual se desarrolla la obra de un autor. Nuestra mirada pretende ser una mirada desde la poesía y hacia la poesía. Si se quiere será una mirada hermenéutica, pero vista desde los ojos de un creador.
La poesía es según mi discutible opinión, las más perfecta y pura de todas las artes y su forma de expresión, el verso, la expresión más cercana de recreación que tienen los hombres para acercarse sin máscaras a su mundo interior. La poesía en suma, es una forma pura de conocimiento, la forma estética donde se expresa mejor la filosofía. La poesía en sí es sabiduría, los griegos por algo definían como "Logos" al conocimiento, como un sistema de pensamiento racional, osea un discurso mimético y rígido, mas utilizaban la acepción "poiesis" cuando querían expresar sabiduría como conocimiento creador.
Todo acto de crítica literaria que deje la demagogia formal es en suma un acto de gusto y todo acto de conocimiento básicamente es un acto de "fe" y en este acto de "fe" por tratar de comprender la poesía, sus misterios, orígenes y devenires, partiré con mi segundo acto de "fe" literario que es afirmar que la poesía escrita en lengua castellana por originalidad y brillantez, es una de las poesías -sino la mejor-más importante del mundo. Mas desarrollar esta firmación podría ser motivo de un libro aparte y no es mi deseo apartarme de la temática central de esta introducción crítica.
Como dije enteriormente, la poesía hecha en lengua castellanaes una de las poesías más importantes del mundo. Desde el Mio Cid, Jorge Manrique, pasando por los grandes maestros líricos del siglo de oro español como Góngora y Quevedo, Juan Ramón Jiménez y la generación del 27 con Lorca, Cernuda, Salinas y Miguel Hernández, la poesía escrita en la lengua de Cervantes ha gozado y goza de una rebosante salud. Es importante señalar que la poesía escrita castellana durante la época de la colonia española en Latinoamérica, tuvo dos destacados representantes al nivel de los más celebrados poetas del siglo de oro en España, como son la poeta mexicana Sor Juana Inés de la Cruz y el poeta peruano Juan de Espinosa Medrano, alias "El Lunarejo". Esta tradición poética en Latinoamérica fue continuada por los poetas modernistas Rubén Darío y José Santos Chocano, entre otros, quienes luego dieron paso a grandes maestros como Vallejo , Neruda, Huidobro y Octavio Paz.
Es casi desconocido el devenir poético de la poesía escrita en nuestro idiona luego de los poetas posmodernistas latinoamericanos y la generación del 27 en España. Sabemos de la existencia de poetas importantes en Latinoamérica como Eunice Odio, Carlos Martínez Rivas, Lezama Lima, Jorge Eduardo Eielson, Nicanor Parra, Alejandra Pizarnick. Más valgan verdades, son pocos los poetas que podido romper el pequeño circuito académico literario para poder acceder a un público más amplio, como si lo han logrado Jaime Sabines y Mario Benedetti, aunque debo acotar que estos autores son de una obra menos importante que los anteriores nombrados. De España podemos señalar la poesía hecha por los autores de la denominada generación poética de los 50´s, entre los cuales destacan los poetas Francisco Brines, José Agustín Goytisolo, Jaine Gil de Biedma, José Ángel Valente, ángel González y Claudio Rodríguez.
Empero, es significativo encontrar un gran desconocimiento por parte de los lectores, de la poesía escrita por nuevos valores poéticos en nuestro idioma; esto, entre otras razones, se debe a la falta de comunicación y diálogo entre poetas que hablamos la misma lengua, y a la nula integración editorial por parte de la mayoría de paises de América Latina y España. Esta antología, este aproximamiento poético, nace con el fin de dar a conocer a los lectores los nuevos adalides de la poesía escrita en castellano. Empezaremos primero con una semblanza estética en el cual se desenvuelven la Nueva Poesía Hispanoamericana y su posterior devenir en España y Latinoaérica, a través de un literario viaje imaginario.
En la actualidad la mayoría de estos poetas escriben dentro de un contexto social en el cual se ha anunciado el agotamiento de los grandes discursos de la modernidad, y por ende, también, del fenecimiento de las grandes propuestas estéticas de la modernidad que desde los años aurorales del romanticismo, acabarían en su vertiente más radical y extrema que vienen a ser las vanguardias literarias europeas de la primera mitad del siglo XX. El afán de novedad y la búsqueda de originalidad en forma compulsiva, agotaron estas propuestas literarias de la era moderna para dar paso a un escenario postvanguardista en el cual predominaban los discursos eclécticos y a-críticos de la posmodernidad. Este quiebre de paradigmas poéticos y literarios derivó en la búsqueda de nuevas propuestas líricas que hallaron su renovación en una poética del pastiche y en una poetización superficial y vana. Todo ello se enmarca dentro de la dictadura del mercado editorial y sus criterios de lo que es correcto comercialmente para editar. Hay que agregar que en esta época el papel gravitante de la poesía y de los poetas en la esfera pública decayó notoriamente. Todo ello ha posibilitado la creación de una gaseosa postvanguardia experimental que cae en una nihilista pirotecnia verbal, pero que carece del sentido básico y fundamental que tenían las vanguardias poéticas de la modernidad, que es, el sentido crítico. Con crítico no me refiero a una crítica -valga la reiteración- discursiva social, sino a una visión personal, distinta y autónoma del creador, en este caso del poeta frente a las leyes, ideologías y reglas del mercado editorial mercantil.
Esta visión autónoma del arte y la libertad de expresión poética, si bien es cierto, se teoriza y cimienta en la modernidad, tiene sus precursores en muchos poetas y artistas que a través de la historia se han enfrentado al canon de las formas literarias y las estructuras sociales de su época. La tradición libertaria en contra de los discursos de poder siempre han existido en la poesía. Esto viene desde Li Po, quien se enfrentó al emperador chino Xuan Zhong, pasando por Villon, que desafió a los señores feudales de su época, o el caso emblemático de la poeta rusa Tsvetáeva quien realizó una crítica lúcida al régimen autoritario comunista soviético, o más recientemente la actitud contestataria de los poetas Bukowski y Ginsberg contra el discurso de la utopía virtual de la sociedad del consumo y del espectáculo del imperio estadounidense.
Ingresando a las estéticas de nuestra contemporaneidad, que se desenvuelven entre una visión postmoderna y más allá de la postmodernidad, empezaré mi análisis en la madre patria para luego continuar en latinoamérica en esta octava edición de nuestra antología que tiene como eje temático a la naturaleza, y cuyo título"¿Qué es lo que llamamos Naturaleza, sino un poema oculto bajo una escritura misteriosa?" , es perteneciente a Schelling. En España, a comienzos de los años setenta surgiría una agrupación llamada los novísmos quienes fueron tal vez la última experiencia literaria con propuestas neovanguardistas de importancia en aquel país, que en opinión de José María Castellet quien hizo el prólogo a tan paradigmática publicación, tuvo la intención de "manifestar la existencia de un nuevo tipo de poesía cuya tentativa era, precisamentee la de oponerse -o ignorar- a la poesía anterior. Por eso, los poetas allí presentados, reivindicarían lo que durante las últimas décadas se había rechazado: el decadentismo, el esteticismo, el lujoso léxico modernista, el estilo de la vanguardia, el malditismo". Esta reivindicación crítica es comprensible teniendo en cuenta el contexto conservador y represivo de la dictadura de Franco. De esta denominada generación de los "novísimos",he seleccionado la poética cultista y de resonancias minimalistas del poeta y crítico literario Jaime Siles, como también la poética oscura, intensa y descarnada de Leopoldo María Panero. Luis Antonio de Villena es un autor considerado de tránsito, que aunque no fue editado en aquella mítica primera publicación de los novísimos españoles de Castellet, fue incorporado a esta nueva pléyade de poetas en posteriores publicaciones. Pero también Villena es el autor que da origen a lo que se denomina poetas de la experiencia, los cuales son los poetas españoles más gravitantes en la península española desde finales de los años ochenta hasta la actualidad. Básicamente, la poética de la experiencia descansa en una lírica de corte figurativo, con temas urbanos y de referencias al pasado. Una poesía que pretendía hablar desde la cotidianidad a partir de una base coloquial y con visos metafísicos. De esta corriente poética hemos seleccionado la poesía de Luis Antonio de Villena, lacual, es una poesía realista, pero glamorosa; que habla desde los temas cotidianos, una poesía que apela a la anécdota, a temas urbanos sin renunciar a una melancólica nostalgia por tematizar los tiempos pasados. La poesía de Felipe Benítez Reyes a pesar de compartir premisas poéticas similares con la de Villena, profundiza más en un eclecticismo depurado y un conceptualismo lúcido.
Paralelo a estos poetas renombrados de los novísimos y la experiencia, hay un grupo de poetas españoles que han desarrollado una labor poética menos publicitada pero no por ello menos importante. Juan Carlos Gómez Rodríguez desarrolla una poesía llena de una perfección formal inusitada que transita entre el rigor con la palabra y la iluminación oriental. Antonio García Vargas ha logrado una extraña pero feliz mixtura entre la experimentación con el lenguaje y la belleza de la imagen. Jaime Rosa es un poeta que logra unir filosofía y poesía, una poesía del conocimiento llena de metáforas sublimes y reflexiones hondas. Celina de Sampedro y Agustín García hacen una poesía pictórica en la cual los poemas son como cuadros desplegándose en la página en blanco. En el caso de Celina, en una serie de imágenes simbólicas llenas de sabiduría y en Agustín en la indagación metafísica. Kepa Murua hace una poesía profunda que no hace concesiones al barroquismo vacío y busca siempre la palabra precisa. Teresa Domingo Catalá más allá de sus búsquedas estéticas, considero, está más centrada en búsqueda de la poética en sí y en ese sendero de pureza lírica, deja estelas resplandecientes en sus versos. Isabel Alamar crea un universo poético en donde la concisión de la palabra y el desborde son sus características esenciales. Antonio Pérez Morte hace una poesía llena de signos literarios y a pesar de ello de versos transparentes. Cristina Ruberte París, es una poeta del silencio y de bellas imágenes. Iván Humanes, es una joven promesa que camina entre la audacia formal y la erudición clásica. Mar Calvo Suances es la oscuridad de Baudelaire hecha poesía.
De España cruzamos el atlánticoy pasamos a México, en donde hay que señalar la poesía de David Huerta como una de las más interesantes y renovadoras que ha dado la tierra azteca luego de Octavio Paz. Al igual que Huerta Jeanette Claríón, es una de las poetas más importantes en lengua castellana que surgen en México luego de la irrupción de la enorme figura de Octavio Paz. Clarión ha logrado hacer una poética del conocimiento, iluminadora y de gran plasticidad y belleza. Julio César Aguilar como Humberto Garza es el poeta neo-clásico por excelencia. Un dato para acotar aquí es que tanto Julio César Aguilar como Humberto Garza reesiden en Esstados Unidos y es allí donde vienen desplegando su oficio poético, los cuales vienen colateralmente a representar a la gran población mexicana que se expresa culturalmente en USA. José Martín Hurtado Gálvez es el poeta de las grandes metáforas. María Dolores Pliego Domínguez, es la poeta que logra unir armonicamente la estructura y la intensidad lírica en el poema. Yelenia Cuervo, poetiza sobre la noche con una madurez literaria inusitada para su corta edad.
Centroamérica y el Caribe son espacios geográficos donde se está desenvolviendo una gran actividad poética en la actualidad y que tienen al escritor costarricense Alfonso Chase, como su más alto exponente poético. Puerto Rico, que ahora forma parte de Estados Unidos como un estado asociado, se halla representado por la poesía de Wenceslao Serra Deliz, quien es un importante exponente de la poesía portorriqueña. Celia Altschuler participa con una poesía entre paisajista y romántica y Ana María Fuster es una poeta que con oficio, desde una poética cotidiana, repressenta a las nuevas generaciones poéticas de su país. La poesía Hondureña tiene a Marco Antonio Madrrid como su más interesante realidad lírica, el cual ha logrado una valiosa poesía llena de reminiscencias clásicas griegas. Mientras Hilda Interiano de Payes es parte de una poética naturalista llena de sencillez y armonía. María Eugenia Caseiro, poeta cubana residente en Miami, nos departe una poesía sugerida y llena de imágenes destellantes. La obra del poeta salvadoreño Txamba Payes es un extraordinario homenaje al trabajo artesano con la palabra.
Bajamos ahora a Sudamérica, y de Colombia la poesía tanática, trágica y hermosa de Raúl Gómez Jattin nos hace un guiño cómplice. Héctor José Corredor Cuervo poeta colombiano nos señala que la sencillez en poesía es sinónimo de clásico. Celia Lamounier, desde Brasil, nos comunica en lengua portuguesa que "Nao palabras / apenas a música da perfeicao". En Perú nos recibe el poeta Antonio Cisneros con su gran poesía plena de humor coloquial y síntesis verbal única y extraordinaria. Enrique Verástegui, nos transmite una epistemología sabia de la palabra genial, erudita y lúcida. Luego de esstos clásicos vivos de nnuestra poesía como son Cisneros y Verásteegui, nos acompaña la poesía barroca y estremecedora de Héctor Ñaupari. Gersón Paredes nos trae la ofrenda del fuego y Yanet Pizarro Rubio la sabiduría precoz del frondoso árbol de papaya.
Más al sur, desde Chile, el epigrama de Eduardo Llanos nos hace sentir que estamos en territorio sagrado, donde las palabras son vehículos de eternidad y donde se erige incólume una de las cumbres de la poesía actual llamada "Llanos". Jaime Hales nos dice "amé tus manos marcadas de relatos" y confirmo que Chile es tierra de poetas. Cruzamos los andes y en Bolivia nos recibe la poesía trascendente y amatoria de Aníbal Crespo Ross. Margarita Solari "sentada junto a una tribu" nos regala versos de esperanza en Uruguay. Y finalizo este viaje imaginario a través de nuestra América, en Argentina, donde el gran poeta Manuel Lozano poetiza los universos míticos de la palabra atemporal, Ernesto Kahan, aterriza enamorado en la isla de Neruda, y Ricardo Costa, "Maestro", nos señala "más allá de lo que es imposible contemplar, no existe lenguaje", y a pesar de ello, inclaudicables seguimos escribiendo poesía...
Muchos de los poetas compilados en esta antología poseen un amplio reconocimiento literario en sus paises de origen y varios han logrado abrirse paso a través de las fronteras, otros son sólo solitarios guerreros de la palabra. Todas estas voces expresan cabalmente el nuevo mosaico en el cual se desenvuelven los derroteros de la poesía escrita en nuestro idioma para el siglo XXI. Ésta, es, la muestra más importante de la nueva poesía que se está escribiendo en nuestra lengua después de los grandes poetas postmodernistas en América Latina y en España, luego de la generación del cincuenta.
En resumen, ésta es la primera antología de la Nueva Poesía Hispanoamericana que va más allá de la postmodernidad, la cual presenta ante el público hispano hablante, a los nuevos poetas de nuestro firmamento literario, ellos y su poesía serán los responsables ante el tiempo de la vigencia de nuestra valiosa tradición literaria.
(LEO ZELADA, Lima 1 de Marzo de 2005)
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ale -
Bernardina -