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Antonio Pérez Morte

Roberto

Roberto

 

Vino de un lugar donde crecen las palmeras y todavía se dan las buenas noches, como escribió Ana María Drack.    Lejos del mar siguió creciendo hacia adentro e  hizo pinitos musicales, mientras cuidaba de los otros.   Participó en un concurso de cantautores donde no había triunfitos ni grandes triunfadores, y quedo bien, bastante bien,  muy bien.  ¡Sin trabajo fijo, ha trabajado mucho! Fijo que ha trabajado:   Bombero, electricista, contrabandista de sentimientos...   y por aquí sigue deambulando,  a pata o en bicicleta, en su viejo Rover dorado, con la sonrisa siempre puesta y a la espalda, su macuto cargado de canciones.  Roberto Segovia "el ilicitano de Sabíñánigo" es un tipo solidario, campechano y feliz, que derrocha energía.     Un chico grande, enamorado de las composiciones de Adolfo, Cánovas, Rodrigo y Guzmán, y de Pablo Guerrero.  Formó parte del grupo heavy Réquiem y es miembro del Orfeón Serrablés.  Ha entonado su "Melodía de un soldado" en mil garitos y ninguna garita.   Se desnudó hace unos años  como telonero de  Jaime Urrutia, aderezando su streap-tease con música y poesía.   ¡Se sigue desnudando a cada paso!

                              

1 comentario

iratxe y mussa -

cuando escuchamos sus canciones alucinamos con la forma tan sencilla de ver lo complicado y con la vision tan original de cosas que parecen estupidas,a parte de esto,encima es un tio puta madre