Blogia
Antonio Pérez Morte

FIN DE SEMANA EN ZUERA

FIN DE SEMANA EN ZUERA

Vuelvo a Zuera después de varios meses. Vuelvo a pasear por sus calles, a reencontrarme con mi familia y mis amigos, con gente a la que quiero mucho y veo poco. Vuelvo...

Vuelvo a pasear en la mañana otoñal del domingo, con Ana y mis hijos, por el Parque del Gállego: El paseo fluvial, está lleno de luz, de griterío de críos, de adolescentes y jóvenes a los que ya no reconozco.

Multitud de inmigrantes de los paises del Este, buscan el mismo sol que los zufarienses: Zuera ha empezado, felizmente, a "contaminarse", como diría Pedro Guerra.

Contemplo una vez más, la maravillosa escultura que Miguel Ángel Arrudi dedicó al insigne oceanógrafo Odón de Buen, y elevo sobre mis hombros a Juan, que la contempla extasiado.

Seguimos caminando, entre las numerosas paradas de mis paisanos. Pablo, protesta por mis numerosos "capazos". Se cansa de oirme "charlatar" (como decía de pequeño) sobre nuestras andanzas cotidianas por el Serrablo: ¡Todo el mundo pregunta lo mismo! Así que nos vamos a casa y aplazamos para el día siguiente la visita al camposanto.

EL lunes al mediodía, acudimos al cementerio sin críos: Vuelven a sorprenderme en las lápidas los rostros de nuevas personas desaparecidas. Luego alguien habla del miedo a los muertos, y sonrie cuando le digo, completamente en serio, que a mí nunca me atemorizaron los muertos, pero que sí lo hicieron, los demasiado vivos.

0 comentarios